El comercio de barrio sube en confianza y ventas
Según los últimos datos del INE; las ventas de las tiendas con un solo local de venta al público han aumentado en el último año un 3,3%. Esto se explica porque los consumidores buscan novedades en la personalización que les ofrecen estas pequeñas empresas y porque la cultura de la gente cambia.
Por un lado, está la conciencia de los usuarios, que están más dispuestos a hacer esfuerzos por tener un producto mejor. Ahora estos pequeños comercios no solamente ofrecen productos, sino que van más allá, con talleres, catas, cursos, exposiciones, dando un valor añadido a los clientes.
Con la preferencia de productos de proximidad, cada vez son más los consumidores que destinan parte de su dinero a la salud, a comprar productos de referencia, sanos, buenos, frescos, naturales y con sabor. Aunque queda mucho camino por recorrer, los pequeños comercios se están adaptando a las nuevas tecnologías. Muchas tiendas físicas tienen sus ecommerce y sacan partido de ello, aunque una buena parte considera que las ventas en Internet son menores.
En muchos ayuntamientos se establecen ayudas para que el comercio pequeño pueda adaptarse y aprender en nuevas tecnologías para sacar partido de ellas. Una gran parte tiene página web aunque casi no la mantienen. Lo que más valoran los usuarios es el consejo y el asesoramiento de una persona que, bien por Internet o bien de manera física les pueda dar su valoración profesional.
Como en otros sectores, los valores añadidos son tenidos en cuenta por lo que se espera que las tiendas de barrio todavía puedan dar mucha guerra y no cuelguen los carteles de alquiler como estaba sucediendo en muchos lugares.