EL RECHAZO A LAS DONACIONES DE AMANCIO ORTEGA

La Fundación Amancio Ortega llevo a cabo, el pasado Marzo, una donación de 320 millones de euros para la actualización de aparatos activos en la lucha contra el cáncer. Esto ha suscitado un gran rechazo por parte de asociaciones de usuarios de la sanidad pública, ya que declaran que la financiación de este tipo de equipos tendría que ser responsabilidad de las instituciones públicas.

En concreto la Asociación para la defensa de la Sanidad Pública de Aragón, ha condenado la donación de 10 millones de euros de esta misma fundación para la comunidad. Declarando que “Nuestra comunidad no tiene que recurrir, aceptar, ni agradecer la generosidad de ninguna persona o entidad. Aspirando a una adecuada financiación de las necesidades mediante una fiscalidad progresiva que redistribuya recursos priorizando a la sanidad pública”. Este colectivo está formado por profesionales de la sanidad y que se hacen llamar públicamente profesionales “progresistas”.

La portavoz y diputada de Podemos en el Parlamento Navarro, Laura Pérez Ruano, ha manifestado que desearían menos “filantropía barata y justicia fiscal” ante la cantidad de dinero donado por la fundación. Y aporta que no dicen que el gobierno navarro tuviera que aceptar o no la donación, si no que no sería necesario ese tipo de aceptaciones si hubiera recursos suficientes para dotar a nuestro sistema sanitario de recursos avanzados.

A parte de este tipo de agrupaciones y personajes de la vida política de nuestro país, esta noticia también se ha hecho eco en las redes sociales. En especial en Twitter, en el cual hay infinidad de comentarios al respecto ofreciendo su rechazo y aprobación, por parte de personas anónimas y públicas, a esta aportación generada por Amancio Ortega. Increíbles opiniones en las cuales se visualiza la postura de cada uno. Personas que en esta red social aclaman el premio nobel de la paz para Amancio Ortega o simplemente comparan su increíble fortuna (en porcentaje) con la cantidad donada, transmitiendo de forma coloquial su rechazo a este tipo de donaciones. También han puesto de manifiesto que esta aportación es simplemente un lavado de cara del propio Ortega.

Desde la fundación se traslada, que esta aportación económica, es una “iniciativa personal” de Amancio Ortega y que además es absolutamente ajena a sus otros negocios. Manifestó que esta entidad no toma decisiones sobre cómo se gestiona el sistema sanitario y que la decisión de qué equipamientos van a ser adquiridos ha correspondido a los sistemas de salud de cada comunidad y a los profesionales en esta cuestión de cada una de estas comunidades. Por último no han querido declarar ninguna opinión al respecto de las manifestaciones de las agrupaciones de usuarios.  

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